sábado, 18 de diciembre de 2010

The Tree of Life, de Terrence Malick

Aquí os dejo el trailer de la última película de uno de los pocos grandes maestros del cine que quedan en mi opinión, Terrence Malick.
Los que lo conozcáis enhorabuena, ya sabéis lo que vais a ver, y para los que no, pronto un nuevo post sobre el director y su filmografía en este mismo blog.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Las Arañas, de Fritz Lang





Kay Hoog, un multimillonario aventurero, encuentra en el mar una botella con un mensaje de un profesor de Harvard que desapareció en Perú. Civilizaciones antiguas, un rescate, una mina de oro inacabable… Hoog lo tiene muy claro, debe embarcarse en esa aventura. Pero ya incluso desde antes de comenzar su viaje, el aventurero se topará con la organización criminal secreta “Las Arañas” y una de sus principales cabecillas Lio Sha, implacable y terrible antagonista de Kay Hoog, que por sus propios intereses, deberá impedir que el millonario emprenda su viaje.

Con esta premisa comienza la primera parte de “Las Arañas”, bautizada como “The Golden Sea”. La intención de Lang era rodar un serial en cuatro partes (Los seriales estaban muy de moda en aquella época con ejemplos célebres como “Los Vampiros” de Feuillade), de las cuales solo pudo rodar dos “The Golden Sea” y “The Diamond Ship”, dejando “The Secret of the Sphinx” y “For Asia´s Imperial Crown” tan solo escritas. Y a pesar de estar concebidas como un mero entretenimiento podemos ver ya el buen hacer de Lang a la hora de narrar historias.

En su vertiente “entretenida” sencillamente no se le puede pedir más a “The Golden Sea” y “The Diamond Ship”: lugares remotos y exóticos, viajes en barco, en globo, civilizaciones perdidas, rescates en el último momento, princesas, mapas, piratas, persecuciones, decorados y recreaciones impresionantes, acción, conspiraciones, suspense… vamos, todos los ingredientes que una buena película de aventuras debe tener, Lang ya los puso en estas dos obras.


El director fue durante toda su vida un gran viajero y esto queda plasmado en sus películas, sobre todo las que hizo en Alemania. Los decorados y el arte están muy cuidados, trasladándonos a Perú, México, India, una ciudad subterránea china o la maravillosa mansión de Kay Hoog. El responsable de esto, además del propio Lang que era muy cuidadoso en este aspecto, fue Otto Hunte, que también trabajará con Lang en las maravillosas “Los Nibelungos, 1923”, “Los Espías, 1928” y “La Mujer en la Luna, 1929”.

Otro colaborador vital de Lang en “Las Arañas” fue Karl Freund, director de fotografía de gran importancia en el movimiento expresionista. A pesar de que el expresionismo alemán no ha nacido “oficialmente” (El Gabinete del Doctor Caligari no se había estrenado aún y Lang rechazó este proyecto precisamente para rodar “The Diamond Ship”), las imágenes de “Las Arañas” son ya claramente expresionistas, llenas de fuerza y perfectas para la narración de una historia de estas características, sobre todo en capítulos con un aire más “sobrenatural” como las escenas ambientadas en la India, o los episodios de hipnosis que sufre alguno de los protagonistas.


Por si todo lo dicho sabe a poco no hay que olvidar el talento que tiene Fritz Lang a la hora de contar historias. Un uso inteligente del montaje, muy desarrollado para la época, transiciones espaciotemporales suaves, invisibles, dan a la narración el ritmo ágil y trepidante que una historia como esta pide, el original uso de los fundidos y encadenados para narrar y economizar tan propios del director o el hecho de poder ver como en 1919, incluso antes, tenían muy claro cómo usar el “cliffhanger (el clásico continuara… que usa cualquier serie), hacen que ver esta saga muda sea todo un placer.

Es la “historia de aventuras ideal”, tanto es así que me extraña que ningún productor americano de estos que hacen últimamente remakes y adaptaciones de hasta el Comecocos, haya caído en lo interesante que podría ser sacar una saga actualizada (ojo, que cuatro películas les darían mucho dinero). Aunque bueno, mejor me callo no vaya a ser que alguno lea esto, le de por ver cine mudo, se saque una chapuza informatizada de la manga y nos jorobe el clásico.

Lo único a lamentar es que no pudiéramos ver el final de las aventuras de Kay Hoog”, porque lo que quedaba de la historia prometía de verdad.